No olvidemos que el significado de la palabra representante es el de aquella persona que sustituye a alguien o hace sus veces, por ello en CNT, tanto en los sindicatos como confederalmente no somos representantes de la clase trabajadora, no la sustituimos. Somos trabajadores y trabajadoras que luchan mano a mano por sus derechos laborales y sociales y por ello no aceptamos representatividad, ya sea personal, de entidad o de organismo.
Te representa la clase política que te dice qué tienes que hacer, cómo y cuándo. Te hace burdos juegos de mano para convencerte de que lo blanco es negro y lo negro gama de colores; y te traiciona tomando decisiones que te sitúan, cada vez más, en la miseria. Es por el bien de la nación, nos cuentan, y ya sabemos que la nación son los intereses de la clase dirigente.
Te representan los sindicaleros profesionales que desde sus cargos distribuyen las consignas dirigidas a crear la inacción y pasividad de la clase trabajadora ante la injusticia.
Te representan los comités de la empresa, que gestionan las consignas y hacen de barrera para que la presión de la clase trabajadora desaparezca y queden en barbecho los esfuerzos de ésta para rebelarse.
Así, al sustituirte, quien dice representarte te dirige, alecciona, manipula y finalmente, traiciona en nombre de su interés, que suelen llamar general. En definitiva, huye de cualquiera que diga representarte, te traicionará en beneficio propio.
En CNT somos personas trabajadoras que se coordinan para organizase entre iguales. No existen, no han de existir, representantes en una organización entre iguales. Cuando se necesita transmitir algún acuerdo/decisión se nombran delegaciones que transmiten los mismos ya sea orgánicamente, al estado o la patronal. Se transmite la información entregada por su asamblea, taxativamente. La delegación no ejerce la representatividad ya que la representatividad (esa capacidad de actuar en nombre de una persona, de una institución o de un colectivo) como hemos razonado anteriormente asume la interpretación, cambia incluso o niega el mandato recibido y presenta su opinión como la de la parte representada al margen de lo decidido por la misma.
Por eso en CNT no queremos, no tenemos representantes. Sólo entre iguales podemos deshacernos de toda esa jauría que pretende representarnos y que persigue sus intereses y la exaltación de su ego.
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